Son muchas las voces de expertos que reclaman, desde el principio del confinamiento, una mayor flexibilidad para uno de los sectores de la población más vulnerables en esta crisis: los niños.
Psicólogos y expertos en educación apelan a que las consecuencias de que los niños pasen tanto tiempo encerrados en casa pueden ser perjudiciales para su crecimiento y su salud. Es por ello que una de las primeras medidas para salir del confinamiento en prácticamente todos los países europeos ha sido permitir las salidas controladas de los menores, algo que en España entrará en vigor el próximo lunes.
Consecuencias psicológicas del confinamiento para los niños
Hasta ahora, son precisamente los niños el único colectivo que no podía salir a la calle. Mientras adultos, mayores y mascotas pueden salir a realizar recados como acudir al supermercado, a tirar la basura, a la farmacia o al banco, los niños están siendo los más perjudicados ya que no hay ninguna normativa que les incluya a ellos.
Algunos cuentan con jardines, terrazas o balcones para cubrir su necesidad de movimiento al aire libre. Pero otros solo cuentan con ventanas como vínculo con el exterior y las consecuencias, señalan los expertos, pueden verse incluso tiempo después del confinamiento.
Así lo explicaba José Antonio Luengo, psicólogo y especialista en Psicología Educativa y Sanitaria, al diario EL PAÍS: “es cierto que los niños se adaptan mejor que los adultos, pero eso no quiere decir que no estén sufriendo”. Según opina, se debe a que los niños no siempre son capaces de expresarlo de la misma manera que un adulto. Y añade que “un último estudio hecho en China, habla de que un tercio de la población padece o padecerá Trastorno de Estrés Postraumático, y este es un trastorno que aparece después”.
Entre las consecuencias psicológicas que sí que podemos ver ahora en los niños, el psicólogo cita varias concretas: irritación en su carácter, necesidad de mucha actividad y movimiento o, todo lo contrario, que estén aletargados. Pero no uno o dos días concretos, sino de manera constante o más permanente que antes.
Estos cambios en su carácter y sus rutinas también están teniendo consecuencias en su estado fisiológico: al moverse menos, a muchos niños les está costando conciliar más el sueño. En menor medida, también se están detectando desequilibrios con la comida en los niños (comiendo más o menos que antes), e incluso otras consecuencias como hacerse de nuevo pipí en la cama durante la noche. Todos estos cambios son normales en una situación tan excepcional como esta, y sobre todo, requieren de atención y comprensión por parte de los adultos con los que conviven.
Por qué ellos deben ser los primeros en salir a la calle
Por todo ello, la noticia de que pronto podrán salir a la calle se recibe como agua de mayo. Volver a pasear y jugar al aire libre, aunque sea una hora al día, mejorará enormemente su experiencia durante el confinamiento. Te contamos por qué:
- Reconocimiento: Sentir que están incluidos dentro de la sociedad y que sus derechos están siendo valorados, les hará sentirse importantes, y por tanto, mejor.
- Necesidad de movimiento: Aunque se muevan dentro de casa, salir a dar pequeños paseos les ayudará a mantener su desarrollo psicomotor activo. Además, estar activos al aire libre, mantendrá su sistema inmune mucho más fuerte y estarán más preparados para lo que pueda llegar después.
- Estabilidad emocional: Ese desfogue de actividad y de expresión física, les ayudará a estar más calmados emocionalmente durante el resto del día, ya que tendrán más cubierta una de sus necesidades más importantes de su etapa vital (la de movimiento y actividad).
- Mejoras fisiológicas: Al mejorar su estado anímico y mantenerse más activos, es muy probable que vuelvan a comer y dormir mejor, y disminuya su miedo o ansiedad si lo padecen.
Recomendaciones para minimizar las consecuencias del confinamiento en niños
Pese a esta nueva medida que supondrá un buen respiro para niñas y niñas, todavía nos quedan muchos momentos en casa. Para hacer los días más llevaderos, muchos expertos se han encargado de dar, por diferentes vías, algunas recomendaciones.
Resumimos aquí algunas, que por supuesto, son orientaciones generales y deberán ser adaptadas a la edad y circunstancia de cada niño:
- Establecer rutinas: Aunque podamos ser más permisivos con las horas de sueño, es importante no descontrolar tanto el reloj biológico de los niños y establecer una nueva forma de vida con sus propios horarios.
- Actividad física y alimentación equilibrada: Ahora más que nunca, es importante mantener una alimentación rica en frutas, verduras y legumbres, y evitar el exceso de azúcar o ultraprocesados. Establecer una hora de actividad física en casa también es positivo para ese descargue de energía que necesidad todos los niños.
- Estímulos mentales: Es importante activar su actividad cerebral, con diferentes estímulos como juegos de lógica, juegos de mesa, actividades, rompecabezas, etc.
- Gestionar sus emociones: En un momento como este, los niños pasarán por multitud de emociones al día, igual que lo hacemos los adultos. Y no se trata de que eviten sentirlas, sino de que aprendan a gestionarlas. Ayúdales a experimentarlas y manifestarlas, permítele que las exprese y aprenda a identificar su rabia, tristeza o miedo. Y del mismo modo, es positivo también que, como madre o padre, expreses tú también las tuyas.
- Tolerar la frustración: El hecho de querer salir a la calle y no poder hacerlo les brinda una oportunidad para fomentar su paciencia, aprender a esperar y tolerar la frustración.
- Mantener la novedad: Para no tener la sensación de que los días se repiten una y otra vez, y que están todo el tiempo haciendo lo mismo, reserva actividades diferentes para cada semana y así salir de la monotonía. Puede ser una cena o noche temática, un día de disfraces o sencillamente comprar un juego nuevo para que te lo lleven a casa. Para ayudaros, en nuestra sección de descargas, hemos publicado varios juegos imprimibles en versión print and play.
- Uso de dispositivos: con tanto tiempo en casa es probable que sucumbamos a la televisión, la Tablet y el móvil más tiempo del debido. Para evitarlo, establece una serie de normas para su uso y disfrute.
- Favorecer su autonomía: Pasar tanto tiempo en casa con ellos hace que sea un buen momento ayudarles con tareas que pueden comenzar a hacer ellos solos y potenciar así su autonomía y autoestima. Como por ejemplo, hacerse la cama solos, lavarse solos los dientes o cocinar su merienda favorita.
Y, ante todo, calma y mucha paciencia. En momentos como este es muy fácil frustrarse y sentir que no estamos gestionándolo de la mejor manera posible. Desde aquí, nuestro reconocimiento a madres y padres que educan a sus hijos con el objetivo de que sean felices también en tiempos de coronavirus.